Las piscinas, que suelen preferirse para refrescarse y divertirse en los calurosos meses de verano, provocan problemas de salud no deseados.
¿Qué es una infección en una piscina?
La infección en la piscina es un problema de salud causado por las bacterias, los virus y los parásitos que se encuentran en las piscinas.
La cloración inadecuada, la falta de una filtración adecuada del agua de la piscina y el incumplimiento de las normas de higiene por parte de las personas que utilizan la piscina son las principales causas de estas infecciones.
Las infecciones en la piscina suelen producirse en el tracto digestivo, la piel, los oídos y los ojos y provocan diversos síntomas.
Los agentes infecciosos más comunes incluyen microorganismos como la Escherichia coli (E. coli), la Giardia, el Cryptosporidium y la Pseudomonas aeruginosa.
¿Cuáles son los síntomas de una infección en la piscina?
Los síntomas de las infecciones en la piscina varían según el tipo de infección y el microorganismo causante. Pero los síntomas más comunes de una infección en la piscina son:
Problemas gástricos e intestinales
Las náuseas, los vómitos, la diarrea y el dolor abdominal son los síntomas más comunes de las infecciones en la piscina.
Estos síntomas suelen deberse a bacterias o parásitos que se transmiten a través del agua.
Erupciones cutáneas e irritación
Se producen enrojecimiento, picor y sarpullidos en la piel al entrar en contacto con el agua de la piscina.
Esta afección se refiere a las infecciones cutáneas conocidas como «granuloma de piscina», especialmente causadas por bacterias como la Pseudomonas aeruginosa.
Infecciones de oído
La infección del canal auditivo externo, también conocida como «oído de nadador», se produce como resultado de la acumulación de agua de la piscina en el oído y de la reproducción de bacterias.
Se manifiesta por síntomas como dolor de oído, picor y secreción.
Infecciones oculares
El agua de la piscina sin cloro o mal clorada provoca infecciones oculares, como la conjuntivitis (conjuntivitis).
El enrojecimiento de los ojos, el lagrimeo y la sensación de malestar son algunos de los síntomas más comunes.
Infecciones de las vías respiratorias
La inhalación de agua o vapor de la piscina provoca infecciones respiratorias como tos, dolor de garganta e incluso neumonía.
¿Cuáles son los síntomas de una infección en la piscina en los niños?
Los niños son más vulnerables a las infecciones en las piscinas porque su sistema inmunitario no está del todo desarrollado y prestan menos atención a la higiene de las piscinas.
Los síntomas de la infección de la piscina en los niños incluyen:
Diarrea continua
Las infecciones de la piscina en los niños suelen manifestarse por diarrea. Además de la defecación constante y acuosa, también son frecuentes los dolores abdominales y los calambres.
Incendio
La fiebre alta se observa en los niños debido a una infección. La fiebre es una reacción del cuerpo a una infección.
Dolor de oído
La oreja de nadador en los niños es bastante común. Se produce con síntomas como dolor de oído, picor y secreción.
Enrojecimiento y lagrimeo en los ojos
Los síntomas de la conjuntivitis son más pronunciados en los niños. Son comunes el enrojecimiento de los ojos, el lagrimeo y la sensación de malestar.
Debilidad y pérdida de apetito
Debido a la infección, los niños suelen parecer perezosos y sin apetito. Esta afección afecta al estado general de salud de la persona.
¿Cómo se transmite una infección en una piscina?
El tratamiento de las infecciones de la piscina varía según el tipo y la gravedad de la infección. Pero, en general, se pueden aplicar los siguientes métodos de tratamiento:
Descanso y consumo abundante de líquidos
El consumo abundante de líquidos y el descanso son importantes en las infecciones del tracto digestivo. Sustituir el líquido perdido por el cuerpo acelera el proceso de curación.
Tratamiento médico
Los antibióticos se utilizan para las infecciones bacterianas, los fármacos antiparasitarios para las infecciones parasitarias.
Atención a las normas de higiene
Es importante prestar atención a la higiene de las piscinas para reducir el riesgo de infección.
Ducharse antes y después de la piscina, no tragar agua de la piscina y seguir las normas de higiene reduce el riesgo de infección.
Asistencia médica en caso de emergencia
Si los síntomas son graves o no desaparecen durante mucho tiempo, no cabe duda de que debes consultar a un médico.
Hay que buscar atención médica, especialmente en los casos de fiebre alta, diarrea persistente o dolor de oído intenso en los niños.
Como resultado, las infecciones en la piscina son afecciones comunes en verano y pueden provocar problemas de salud importantes.
Preguntas frecuentes
¿La piscina provoca una infección en las vías urinarias?
Las infecciones en la piscina provocan diversos problemas de salud. Pero es raro que provoquen una infección urinaria (ITU) directa. Las infecciones del tracto urinario suelen ser de origen bacteriano, y estas bacterias suelen entrar en las vías urinarias desde fuera. La causa más común de la infección urinaria es la bacteria Escherichia coli (E. coli), y esta bacteria se
debe principalmente al intestino.
¿Los bebés tienen una infección en la piscina?
Sí, la infección de la piscina se produce en los bebés. Como el sistema inmunitario de los bebés aún no está del todo desarrollado, son más vulnerables a las infecciones. El agua sucia o las malas condiciones de higiene provocan infecciones en los bebés con síntomas como diarrea, vómitos, erupciones cutáneas, infecciones oculares
y de oído.