¿Qué es el trastorno esquizoafectivo? ¿Cuáles son los síntomas?
Los profesionales de la salud mental la definen como una enfermedad que conlleva síntomas tanto de un trastorno del estado emocional como de una psicosis. Los pensamientos, las percepciones y el estado emocional de una persona pueden cambiar de forma independiente unos de otros. Un día puede que se encuentre en un estado de energía y alegría intensas, y otro día puede que se vuelva extremadamente infeliz e introvertido.
Los síntomas suelen dividirse en dos grupos básicos. Los primeros son síntomas que se parecen a la esquizofrenia. Estos síntomas incluyen alucinaciones, delirios y trastornos del habla. El segundo grupo son los cambios extremos en el estado emocional. En algunos pacientes, la depresión está en primer plano, mientras que otros pueden sufrir ataques maníacos.
La enfermedad no se desarrolla de la misma manera en todo el mundo. En algunas personas, los síntomas pueden desaparecer con el tiempo, mientras que en otras pueden convertirse en episodios recurrentes. El diagnóstico precoz puede facilitar el control de los síntomas.
¿Cuáles son las causas del trastorno esquizoafectivo?
La causa exacta de esta dolencia no se conoce del todo. Sin embargo, se cree que los factores genéticos desempeñan un papel importante. Se ha observado que el riesgo es mayor en las personas con antecedentes de esquizofrenia, trastorno bipolar o depresión en los miembros de la familia. Los desequilibrios en la química cerebral son otro factor. En particular, las alteraciones en los neurotransmisores como la dopamina y la serotonina pueden influir en el desarrollo de la enfermedad. Estas sustancias químicas regulan tanto los procesos de pensamiento como los estados emocionales.
Además, los traumas infantiles y el estrés crónico también pueden provocar la aparición de la enfermedad. La probabilidad de desarrollar un trastorno esquizoafectivo puede aumentar en edades posteriores, especialmente en las personas que han sido objeto de abuso emocional o físico.
Diferencias entre el trastorno esquizoafectivo y el trastorno bipolar y la esquizofrenia
El trastorno bipolar se caracteriza únicamente por cambios extremos en el estado emocional. En la esquizofrenia, por otro lado, el principal problema son las alteraciones en la estructura del pensamiento. El trastorno esquizoafectivo es un cuadro que combina las características de estas dos enfermedades. En el trastorno bipolar, la persona sufre ataques maníacos después de los episodios depresivos. En el caso del trastorno esquizoafectivo, estos ataques también van acompañados de signos de psicosis. Los delirios y las alucinaciones no se deben solo a cambios en el estado emocional.
La esquizofrenia, por otro lado, se define más como una ruptura en la conexión con la realidad. Los cambios en el estado emocional no suelen ser muy pronunciados. En el diagnóstico del trastorno esquizoafectivo, solo se deben observar los signos de la psicosis durante al menos dos semanas. Este detalle es uno de los factores más importantes que distinguen el diagnóstico de otros trastornos mentales.
Tipos de trastornos esquizoafectivos: tipo bipolar y tipo depresivo
Hay dos subtipos principales. El primero de ellos se llama tipo bipolar. En este tipo, se experimentan episodios maníacos y depresivos. Si bien la persona a veces puede ser demasiado enérgica, conversadora e hiperactiva, a veces puede caer en una profunda desesperación. Estas fluctuaciones pueden afectar significativamente a las relaciones sociales y a la vida laboral de una persona.
En el
tipo depresivo, solo se observan períodos de depresión. La persona se siente infeliz, agotada y reacia durante mucho tiempo. Es difícil llevar a cabo las actividades diarias. Disminución del disfrute de la vida, pueden surgir problemas como el aislamiento social y el descuido del cuidado personal.
La gravedad de los síntomas en ambos tipos puede variar de una persona a otra. Durante el tratamiento, se seleccionan los fármacos y métodos de terapia adecuados, determinando el tipo que predomina. El tratamiento de la enfermedad puede hacerse más eficaz creando un plan a medida.
Proceso diagnóstico y criterios diagnósticos del trastorno esquizoafectivo
Para poder
hacer un diagnóstico, se deben cumplir ciertos criterios. Los profesionales de la salud mental evalúan los síntomas de la persona en detalle.
- Solo se deben observar los signos de psicosis durante al menos dos semanas.
- Se espera que los cambios en el estado emocional continúen durante al menos unas semanas.
- Deberían observarse las alucinaciones, los delirios o las estructuras de pensamiento irregulares.
- Debe haber una pérdida pronunciada de la función que afecte negativamente a la vida diaria.
El proceso
de hacer un diagnóstico requiere una observación y una evaluación detalladas. Se pueden obtener varios dictámenes de expertos diferentes, ya que a veces se puede confundir con otras enfermedades mentales.
Métodos de tratamiento del trastorno esquizoafectivo
El
tratamiento de las enfermedades mentales suele ser posible mediante la combinación de varios métodos de tratamiento. Dado que el trastorno esquizoafectivo presenta un panorama complejo que incluye tanto la psicosis como los cambios en el estado emocional, el proceso de tratamiento debe planificarse de forma individual. Además del tratamiento farmacológico, la psicoterapia y los métodos de apoyo también pueden ayudar a controlar la enfermedad.
- Los reguladores del estado emocional pueden ser especialmente útiles en el tipo bipolar.
- La terapia cognitivo-conductual contribuye a la regulación de los procesos de pensamiento.
- La terapia familiar ayuda a los familiares del paciente a entender la enfermedad y a crear un entorno de apoyo.
El
éxito del proceso de tratamiento está directamente relacionado con la adherencia del paciente al tratamiento y al apoyo que recibe de su entorno. El diagnóstico precoz y el seguimiento regular pueden retrasar el progreso de la enfermedad y mejorar la calidad de la vida diaria de una persona. Aunque no siempre es posible eliminar por completo los síntomas, es posible que se puedan controlar con el tratamiento adecuado. Un plan de tratamiento guiado por un experto puede ayudar a una persona a mantener una vida social y profesional más equilibrada.
Preguntas frecuentes
¿Qué es exactamente el trastorno esquizoafectivo?
Es un trastorno mental complejo que se define como una combinación de esquizofrenia y trastornos del estado emocional. Tanto los signos de psicosis como los ataques depresivos o maníacos se pueden observar en la persona. Esta afección puede afectar profundamente a la estructura de pensamiento, a las emociones y a la vida diaria de una persona.
¿El trastorno esquizoafectivo es permanente?
En algunos pacientes, los síntomas pueden persistir durante muchos años, pero se pueden controlar con tratamiento. El consumo regular de fármacos y psicoterapia puede cambiar positivamente el curso de la enfermedad. El diagnóstico precoz y la intervención correcta pueden mejorar significativamente la calidad de vida.
¿Cuál es la causa del trastorno esquizoafectivo?
Se desconoce la causa exacta, pero se cree que los factores genéticos desempeñan un papel importante. Los desequilibrios y los trastornos de los neurotransmisores que se producen en la química cerebral también pueden influir en el desarrollo de la enfermedad. Los traumas infantiles, el estrés crónico y los factores ambientales también pueden estar entre los factores desencadenantes.
¿Cómo se trata el trastorno esquizoafectivo?
Durante el tratamiento, se pueden utilizar fármacos antipsicóticos, reguladores del estado de ánimo y antidepresivos. Los métodos de psicoterapia ayudan a regular la estructura de los pensamientos de una persona y a mejorar los mecanismos de supervivencia. El apoyo de la familia, un estilo de vida sano y los chequeos médicos regulares también pueden aumentar el éxito del tratamiento.
¿Cuál es la diferencia entre el trastorno esquizoafectivo y la esquizofrenia?
La esquizofrenia se caracteriza más por delirios, alucinaciones y trastornos del pensamiento. En el trastorno esquizoafectivo, además de estos síntomas, se observan episodios depresivos o maníacos. La presencia de cambios en el estado de ánimo es una de las diferencias más obvias entre la esquizofrenia y la esquizofrenia.